Siempre pensaremos en ti.

Querida donante:

En julio fuimos padres de una niña, gracias a ti.

Llevábamos 15 años intentando tener un hijo y casi habíamos perdido toda la esperanza. Con tan sólo la donación de un óvulo, al final se cumplió nuestro deseo más grande. Por eso te estamos eternamente agradecidos. Tan agradecidos que no lo podemos expresar ni con palabras. Tu decisión se merece nuestro máximo respeto.

A pesar de haber nacido un mes antes de la fecha, nuestra hija está sana y es muy despierta. Es una niña muy buena y tranquila. Además es muy guapa. Tiene el pelo rubio oscuro y ojos azules.

Hacemos todo lo posible para ser buenos padres para ella y haremos lo mejor para que sea feliz y esté siempre contenta. Sin embargo, también le vamos a explicar como se ‘creó’, y que una chica muy buena, a parte de nosotros, ayudó a que pudiera venir al mundo.

Una vez más, queremos dar nuestro más profundo agradecimiento y te deseamos todo lo mejor.

Ojalá también se cumpla tu deseo más anhelado.

Siempre pensaremos en ti.

Con todo nuestro cariño,

Los padres.

(Sabadell, agosto 2014.)