La importancia de los controles posteriores

Las pacientes sometidas a tratamientos tanto destructivos como de extirpación por displasias o por infecciones por HPV tienen un cierto riesgo de que estos trastornos se repitan. Por ello durante los primeros años serán sometidas a un control más estricto mediante citologías de cérvix, colposcopia y biopsia si es necesario.