Qué haría diferente si volviera a empezar

Escribo todo esto porque quiero transmitir muchos ánimos a tantas y tantas mujeres que, al igual que yo, han sufrido y siguen sufriendo por no quedarse embarazadas… por ser etiquetadas de infértiles.

¿Qué haría diferente si volviera a empezar? Sin duda, buscaría ayuda mucho antes. Cuando nosotros empezamos a buscar, yo tenía 36 años y llevaba 9 meses con el que ahora es mi marido. Creía firmemente que el milagro de concebir se daría. Sólo había que tener paciencia…. ¡Sólo! En ese momento, era totalmente reacia a hacer ningún tipo de tratamiento de reproducción asistida porque eso no iba conmigo y tenía mis propias teorías… ¡qué equivocada estaba!

Llevábamos dos años intentándolo, cuando una amiga me recomendó un ginecólogo privado bastante reconocido. Me detectaron un hidrosalpinx en la trompa izquierda, o sea que la trompa estaba obstruida y había que operar. Tras la cirugía, no me gustó el enfoque ni la “ligereza” con la que se trató el asunto de empezar un tratamiento para FIV .

Decidimos pedir una segunda opinión y empezamos a cursar trámites para entrar en lista de espera de un hospital público. Una decisión que ahora cambiaría, sin ninguna duda.

Después de un intento frustrado con largas esperas y poca comunicación, me busqué una buena clínica. Y a día de hoy puedo decir que encontré la mejor de todas: Institut Marquès. Con grandes profesionales, en especial la directora Marisa López-Teijón, pero también las doctoras Anna Martí y Priscila Andrade y los doctores Hans Arce y Jordi Suñol.

La Dra. López-Teijón enseguida tuvo muy claro el diagnóstico: factor tubárico bilateral. En esa primera visita ya nos dio mucha información y para la segunda, el 5 de agosto, ya tenía claro que podíamos empezar cuando quisiéramos con una FIV.

Desde el primer momento nos transmitió seguridad, confianza y muchísima fuerza, que en ese momento era lo que más necesitábamos después de las otras experiencias. “Nadie dijo que las guerras se ganaran en la primera batalla“ fue otra de sus frases. ¡Ella estaba con nosotros en esto! La doctora López-Teijón es una gran mujer, además de una excelente profesional.

Lo que de verdad me gustaría transmitir después de haber escrito todo esto, es que es básico encontrar una buena clínica como Institut Marqués, donde te expliquen las cosas con claridad. De otra forma, lo barato sale caro. ¿De qué sirve gastarse 6.000 euros en una FIV si luego resulta que están transfiriendo embriones que no van a llegar a implantarse? Además de todos los procedimientos más científicos, también es fundamental el apoyo emocional.

Yo he tardado 5 años, pero al final ha pasado y estoy felizmente embarazada.

Gracias a la doctora López-Teijón y a todo el equipo de Institut Marquès por hacerlo realidad. Gracias a todas las mujeres que no se rinden por el camino. Gracias a mi marido por estar siempre ahí.

(Enero 2016)